Reguladores del estado de California apuntaron a como la empresa ha dado a entender que sus automóviles son autónomos. Cuando en realidad no tienen este nivel de automatización.
Lo ocurrido no debería sorprender a casi nadie. El Departamento de Vehículos Motorizados de California ha presentado dos acciones contra Tesla. La entidad señala que la compañía utiliza un lenguaje engañoso para dar a entender que sus vehículos pueden movilizarse de forma autónoma, cuando este no es el caso.
Es posible que el lector recuerde que en varias ocasiones hemos señalado que Tesla utiliza el término autopiloto para un nivel de automatización bajo. En Europa dicha categoría está reservada para el nivel en el que el vehículo puede manejarse por sí solo sin asistencia humana. Lo cual resulta lógico, dado que es lo que la palabra sugiere.
No solo una cuestión de definiciones
El DMV también también señala el mal uso del término Full Self-Driving Capability, así como la declaración de que el sistema puede navegar a destino sin que se requiera el accionar de la persona sentada en el asiento del conductor.
No se trata solo de un uso diferente a un término que otras empresas reservan para una tecnología más avanzada. Sino de publicidad que no se condice con las verdaderas capacidades de los Tesla.
Siempre bajo la lupa
A favor de Tesla hay que señalar que en recientemente ha aclarado el alcance de la automatización en sus vehículos. Apuntando incluso que no son autónomos. Sin embargo, el DMV entiende que esta acción no ha sido suficiente para reparar las infracciones previas. No es la primera investigación que pesa sobre Tesla. Muchas otras acciones se han enfocado en las declaraciones de la compañía, el funcionamiento del sistema de autopiloto y el grado de automatización y seguridad que este brinda.