El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, admitió este sábado que las relaciones entre la Unión Europea (UE) y Rusia "están lejos de ser satisfactorias", pero destacó la importancia de mantener abiertos los canales diplomáticos, tras finalizar su viaje a Moscú, que causó controversia entre los países del bloque.
"Los canales diplomáticos deben continuar abiertos, no solo para desactivar crisis o incidentes, sino para tener intercambios directos, enviar mensajes firmes y francos, ahora que las relaciones están lejos de ser satisfactorias", dijo Borrell en un comunicado difundido por el Servicio Europeo de Acción Exterior.
El diplomático español subrayó, asimismo, la preocupación del bloque europeo por la situación de los derechos humanos en Rusia y volvió a condenar la sentencia al opositor ruso Alexey Navalny y solicitar su liberación.
"Durante la visita de Borrell, los diplomáticos de la UE mantuvieron contactos con abogados del señor Navalny", precisó la nota.