Tras los picos de enero, Estados Unidos continuó esta semana con un descenso sustancial de los nuevos casos de coronavirus, aunque los expertos descartaron que sea un efecto de la campaña de vacunación iniciada a fines de diciembre, informaron medios estadounidenses.
"La disminución del número de casos no se puede atribuir a la vacuna contra la Covid-19 ya que ni siquiera una décima parte de la población estadounidense ha sido vacunada", señaló hoy Wafaa El-Sadr, profesor de epidemiología y medicina en la Universidad de Columbia, según el diario USA Today.
La campaña de inmunización contra el coronavirus, iniciada a mediados de diciembre, se ha acelerado esta última semana, con un promedio de 1,3 millones de vacunados pese a las adversidades climáticas, luego de que una tormenta de nieve cerrara temporalmente algunos sitios en el noreste del país.
Sin embargo, los expertos opinan que aún es pronto para comenzar a ver sus efectos en el conjunto de la población.
"La disminución de los casos probablemente se deba a una depresión natural después de que los viajes récord seguidos de reuniones en interiores durante las vacaciones desencadenaran un aumento en las infecciones", explicó, por su parte, la doctora Sarita Shah, profesora asociada de la Escuela de Salud Pública Rollins de la Universidad de Emory.