A todo chancho le llega su San Martín.
El bitcoin ha engordado cada vez más y se ha convertido en un objetivo casi irresistible.
Córdoba es la primera provincia Argentina en esta nueva faena, y es poco probable que sea la última. Luego de modificar el código tributario se han gravado todos los servicios relacionados con las monedas digitales.
Esto supone dos situaciones vinculadas a los ingresos brutos:
Todas las operaciones de compra y venta de monedas digitales en la provincia pagarán impuestos. También las que se realicen fuera de ella cuando el usuario tenga domicilio en Córdoba.
En este caso el impuesto será de un 4,75%.
Además, cuando las monedas digitales se utilicen en una operación por la venta de un bien o la prestación de un servicio también habrá que pagar un impuesto.
La alicuota especial es del 0,25%.
Detalles destacables Más allá de la recaudación un aspecto que puede tener gran impacto es que debido a los impuestos aplicados las autoridades fiscales podrán solicitar información sobre las operaciones realizadas con las monedas digitales.
Este detalle no es menor considerando que las criptomonedas suelen operar favoreciendo el anonimato.
Otro detalle importante es que, aunque el impuesto a las ganancias ya consideraba las monedas digitales, el de córdoba es en realidad el segundo gravamen impuesto, el código tributario provincial aplica una definición sobre las monedas digitales. Las designa como una representación digital de valor que puede ser objeto susceptible de comercio digital, con funciones directas o indirectas para el intercambio y reserva.
El Congreso argentino tiene por su parte dos proyectos de ley en espera que podrían establecer otras definiciones sobre las criptomonedas.
Temores Los críticos de la medida han señalado que el aumento de la presión fiscal será perjudicial para el sector vinculado a las criptomonedas.
Además, no existe una clara diferenciación entre los diferentes activos y queda por definir como se va a determinar la localización de las operaciones.