Bennu se encuentra en una trayectoria que lo acerca a nuestro planeta, pero no lo suficiente para ser una amenaza real. Sin embargo, en 2135 la gravedad de la Tierra podría cambiar su rumbo.
La mala noticia es que el asteroide Bennu pasará muy cerca de nuestro planeta y, aunque ínfima (1 entre 1750), la posibilidad de una colisión existe. Esta predicción supone varias posibles instancias entre este mismo año y el 2300.
La buena noticia es que bajo su actual trayectoria la posibilidad de que impacte antes de que se termine este siglo es prácticamente cero.
Para 2135 la situación es algo más preocupante. Los astrónomos calculan que el asteroide pasará un poco más cerca, ubicándose tan lejos como la mitad de la distancia entre la tierra y la luna.
Y en este momento es cuando las cosas se complican, porque si el asteroide es afectado por la la gravedad de la Tierra esta podría darle nuevo impulso y cambiar su trayectoria de forma tal que unos 50 años después coincidiría con la trayectoria del planeta.
Un problema para el futuro Así pues, suponiendo que la especie humana sobreviva a las epidemias globales y el cambio climático y no se autodestruya en un cataclismo nuclear creado por algún gobierno totalitario demente, nuestros lejanos descendientes tendrán un gran problema en sus manos.
Quizás para entonces la mitad viva en Marte, ese planeta con el que Elon Musk insiste cada tanto.
Bennu mide medio kilómetro. No es lo suficientemente grande para producir una extinción masiva pero el impacto sería importante. Para comenzar, el crater que dejaría sería aproximadamente de unos 5 a 10 kilómetros de diámetro.
Luego hay que considerar la onda expansiva con un área afectada de por lo menos 100 veces el tamaño del crater.
Luego podemos agregar la nube de polvo cubriendo el cielo, algunas explosiones al azar a lo Hollywood, etcétera.
Un excelente video informativo ha sido creado por el diseñador 3D Alvaro Gracia Montoya para el canal MetaBallStudios
Afortunadamente la NASA comenzará un experimento en 2022 para desviar asteroides hacia órbitas más seguras. Para tal fin se enfocará en el asteroide Didymos. China ha considerado utilizar misiles para desviar a Bennu.
La mala noticia es que muchas amenazas no son fácilmente detectables hasta que es casi demasiado tarde.