La industria genera tanta basura como todo el sector IT y de telecomunicaciones de los Países Bajos.
La industria de las criptomonedas, y en particular el sector vinculado al bitcoin, ha sido criticada por el enorme consumo de energía que supone.
Pero este no es el único problema de sustentabilidad a considerar. Un estudio realizado por Alex de Vries de la Universidad Libre de Amsterdan y Christian Stoll de la Universidad Técnica de Múnich alerta sobre la eliminación de quipo obsoleto.
La investigación, publicada en la revista Resources, Conservation & Recycling apunta que cada año la minería del Bitcoin produce una cantidad de desechos electrónicos similar al del sector IT y de telecomunicaciones de los Países Bajos.
Son unas 30.700 toneladas de desperdicio. Cada transacción supone, en promedio, unos 272 gramos.
Eficiencia, especialización y desperdicio La minería necesita de grandes cantidades de hardware. Pero un dispositivo dedicado a esta actividad tiene una vida útil de 1,29 años.
La búsqueda de una mayor eficiencia ha llevado a la adopción de equipos más especializados. Esto tiene como gran inconveniente que una vez que son declarados obsoletos para la minería del bitcoin es imposible utilizarlos para otra actividad o incluso la minería de otras criptomonedas.
Algunos elementos, como los armazones de los dispositivos podrían ser reciclados.
Sin embargo a nivel mundial solo el 17% de los desperdicios electrónicos son reciclados.
Otros problemas El ciclo acelerado de la minería del bitcoin también ha contribuido a varias distorsiones en los mercados. Algunos de los primeros en notar los problemas fueron los aficionados a los videojuegos, dado el uso de los GPU en el minado y el consecuente aumento de los precios. Ahora, otras cadenas de producción han comenzado a tener problemas con el aprovisionamiento de chip, aunque esto se debe también a otros factores.