La abuela de Nahel M., el adolescente de 17 años asesinado en un control policial en el suburbio parisino de Nanterre, pidió que se deje de usar a su nieto como pretexto para sembrar caos y violencia. Lo hizo en medio de los graves disturbios que sacuden a Francia desde hace cinco días.
“Quiero al policía que mató a mi nieto, es todo lo que quiero. Los policías están ahí, felizmente están ahí, y a la gente que está destrozando, les digo que paren”, recalcó la mujer, identificada como Nadia, en declaraciones al canal televisivo BFM.
También afirmó que están usando a la muerte de su nieto como “pretexto” y recalcó que ni las escuelas, ni los vehículos, ni los autobuses que están siendo vandalizados tienen la culpa de la muerte de Nahel, de ascendencia árabe.
“Confío en la justicia”, añadió.
Al menos 719 personas fueron detenidas y 45 policías heridos en una nueva jornada de protestas
En la madrugada del domingo, en una nueva jornada de protestas, 719 personas fueron detenidas y 45 policías resultaron heridos. Además, hubo 871 incendios en la vía pública y daños en 74 edificios, según el último balance oficial.
Sin embargo, el Ministerio de Interior aclaró que fue la noche “más tranquila” desde que estallaron las protestas.
El ataque a un alcalde conmociona a Francia
Las protestas derivaron en fuertes hechos de violencia. Incluso, en L’Ha-les-Roses, en la periferia sur de París, el alcalde, Vincent Jeanbrun, sufrió de madrugada un ataque contra su residencia familiar.
Mientras el jefe comunal trabajaba en la sede municipal, un grupo de personas a los que se busca por intento de asesinato lanzó un coche en llamas contra la casa, en la que se encontraban sus hijos de 5 y 7 años y su esposa. Uno de los niños tuvo que ser atendido por lesiones, al igual que la madre, con una fractura en la pierna.
Este ataque provocó una fuerte indignación social y el repudio de la clase política francesa. “No dejaremos pasar nada. Estaremos al lado de los alcaldes”, subrayó la primera ministra, Élisabeth Borne, mientras visitaba L’Ha-les-Roses.
El Ministerio del Interior anunció que 45.000 policías se desplegarían nuevamente en la noche del domingo en las calles para contrarrestar la violencia.
Nahel, de ascendencia argelina, murió en el suburbio parisino de Nanterre durante un operativo policial.
El video del asesinato mostró a dos oficiales en la ventana del automóvil, uno con su arma apuntando al conductor. Mientras el adolescente avanzaba, el oficial disparó una vez a través del parabrisas. El oficial acusado de matar a Nahel recibió un cargo preliminar de homicidio voluntario.