Un hombre que se encontraba con pedido de captura nacional e internacional por un doble homicidio cometido hace 21 años en la ciudad chaqueña de Roque Sáenz Peña, y por el cual se hallaba prófugo desde 2003 tras escapar de una unidad penitenciaria, fue detenido en la ciudad paraguaya de Caaguazú, informaron este jueves fuentes policiales.
Se trata de Sergio Ricardo Almaraz (40), sobre quien pesa una condena a prisión perpetua por los delitos de "doble homicidio calificado por alevosía y robo a mano armada" en perjuicio de dos remiseros de Chaco y por quien el Ministerio de Seguridad de la Nación ofrecía medio millón de pesos como recompensa para las personas que aportaran datos sobre su paradero.
El subjefe de la Policía de Chaco, comisario general David Vega, quien estuvo a cargo durante años de la búsqueda del prófugo como jefe de Investigaciones de Interior de la fuerza provincial, confirmó a Télam que el hombre fue apresado este jueves en la ciudad paraguaya de Caaguazú y que ya se pidió la extradición para que cumpla prisión por el doble homicidio.
Almaraz estaba con pedido de captura desde el 12 de marzo de 2003, cuando escapó de una unidad penitenciaria de Chaco, donde cumplía su condena a reclusión perpetua por los homicidios de los remiseros Francisco Orrego y Hugo Bernardis, quienes fueron asesinados a balazos en la cabeza y por la espalda durante un robo.
Por ese hecho, ocurrido el domingo 17 de octubre de 1999 en un monte ubicado entre Napenay y Concepción del Bermejo, en proximidades de la ciudad Presidente Roque Sáenz Peña, fueron detenidos, y luego condenados durante un juicio oral, Almaraz y un cómplice llamado Marcelo González.
Ambos fueron alojados en la Alcaidía de Sáenz Peña pero permanecieron allí poco tiempo: "Uno de ellos, González, escapó en el 2001 pero fue recapturado poco después. Actualmente está cumpliendo su pena en la Unidad Penitenciaria de Ezeiza. El otro es Almaraz, quien escapó en el 2003 y nunca más se tuvo noticias de él hasta hoy, que fue detenido", explicó el subjefe de la policía provincial.
Según el comisario Vega, durante todos estos años se lo estuvo buscando al prófugo y se llevaron a cabo importantes medidas ordenadas por el juez Gustavo Rodolfo Lineras, tanto en Chaco, como en Formosa, tras lo cual se ordenó el pedido de captura internacional ante la sospecha de que se hallaba en Paraguay.
"Sabíamos que el padre vivía en Buenos Aires. Se hicieron escuchas telefónicas donde se logró establecer alguna comunicación con una personas que se hallaba en Asunción y también determinamos algunos viajes a Paraguay. También, Migraciones registró viajes de la concubina de Almaraz de Paraguay a Argentina", relató el jefe policial.
Con toda esa información, el comisario general Vega junto a una comitiva policial mantuvo encuentros con Interpol Paraguay para intercambiar información.
Finalmente, tras una investigación realizada por personal de la Policía de Paraguay y de Interpol, se logró la detención del sospechoso que se hallaba con un documento falso a nombre de Pablo Emiliano Cabral.
El operativo se concretó en plena vía pública de la ciudad de Coronel Oviedo, en el departamento de Caaguazú, y que el hombre no opuso resistencia.
Según el diario paraguayo ABC, el jefe de la División de Ejecución de Convenios Internacionales de la policía de ese país, subcomisario Fernando Ruíz, explicó que como el hombre presentó un documento de identidad argentino que parecía falso, se procedió a verificar su identidad mediante huellas dactilares.
"Las huellas dactilares fueron remitidas a las autoridades argentinas por el canal preestablecido, donde se pudo determinar la identidad de esa persona y también se constató que posee tres órdenes de captura", dijo el jefe policial.
El hombre aguarda ahora que se resuelva su extradición al país para continuar con su detención por el doble homicidio.
Al conocer la noticia de la detención, la periodista Andrea Bernardis, hija de uno de los remiseros asesinados, dijo en declaraciones a Noticiero 9 de Chaco que "se cerró círculo" y "se hizo justicia".
"Hasta el día que no le vea entrar a la fiscalía al asesino de mi papá no lo voy a creer", indicó la mujer, quien consideró a Almarez "el asesino más buscado en la provincia del Chaco en 18 años".
"Para la familia es una mezcla de sensaciones. Alegría y tristeza. Es volver todo atrás aunque para nosotros todos los días es lo mismo", expresó la mujer entre lágrimas.
"Ahora nos resta esperar a que lo traigan de Paraguay y ver a dónde va a cumplir la condena. Va a pagar detrás de las rejas, como tiene que ser. Yo ya perdoné en su momento. Así que dejo todo en manos de Dios", añadió.