La fiscal penal de Embarcación, Gabriela Souto, interviene en 23 casos de violencia familiar, de los cuales 10 cuentan con personas detenidas, por hechos denunciados entre la Navidad de 2020 y la primera semana de enero de 2021. Es que a todas las denuncias radicadas previamente por madres o padres en contra de sus hijos, por los delitos de amenazas o lesiones, se agravaron con la comisión del delito de desobediencia judicial. En esos casos, tenían consulta anterior con medidas de conducta dictadas por el Juzgado de Violencia Familiar interviniente y que fueron desacatadas.
Por otra parte, durante el mismo período, se iniciaron otras 13 causas con intervención de la Fiscalía Penal de Embarcación, con dictado de medidas de conducta por parte del Juzgado de Violencia. En esos casos no hubo detenciones ya que las personas imputadas vienen respetando las medidas de conducta impuestas para mantener la condicionalidad de la pena.
La fiscal Gabriela Souto advirtió que la violencia doméstica puede adoptar distintas formas, entre ellas, el abuso emocional o físico, el hostigamiento y las amenazas. “Las relaciones abusivas siempre conllevan un desequilibrio de poder y control y las personas abusadoras eligen palabras y comportamientos intimidatorios e hirientes hacia sus madres o padres”, antes los cuales hay que estar alertas, precisó la fiscal. Y agregó que la mayoría de los hechos abordados por la Fiscalía, se originaron en la preocupante situación sociosanitaria de aumento de adicciones al alcohol y sustancias estupefacientes, cuando hijas o hijos piden dinero a sus padres para adquirirlos y se les niega.