El proyecto de Presupuesto 2023, aprobado por la Cámara de Diputados la semana pasada, comenzó a ser debatido en la tarde del miércoles en la Comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado, con las exposiciones de los secretarios de Programación Económica, Gabriel Rubinstein; de Hacienda, Raúl Rigo; y de Finanzas, Eduardo Setti.
"Para bajar el impuesto inflacionario lo más importante es bajar el déficit todo lo que sea necesario", dijo Rubinstein en el Salón Azul del Palacio Legislativo.
Ante los senadores de la Comisión, el secretario destacó que "este es un presupuesto de transición".
"Sirve para tener la situación más ordenada fiscalmente; en camino hacia el equilibrio fiscal y para pensar en la macroeconomía que logramos hace 20 años, cuando teníamos un supéravit fiscal de tres puntos del PBI", subrayó el economista.
Rubinstein, Rigo y Setti concurrieron a la Comisión presidida por el senador oficialista Ricardo Guerra acompañados por el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan José Bahillo; el secretario de Economía del Conocimiento, Ariel Sujarchuk; y el jefe de asesores de la Secretaría de Agricultura, Juan Manuel Fernández Arocena.
También se hicieron presentes en el Salón Azul del Parlamento Leonardo Madcur, titular de la Unidad de Gabinetes de Asesores; Matias Tombolini, secretario de Comercio; Flavia Royon, secretaria de Energía; Ricardo Casal, secretario Legal y Administrativo; y Jorge Neme, secretario de Planificación de Desarrollo y Competitividad.
La intención del oficialismo en el Senado es discutir el tema a lo largo de dos jornadas, miércoles y jueves, para luego prepararse para emitir dictamen.
El proyecto de Presupuesto 2023 tiene como puntos centrales la previsión de un gasto global de casi $ 29 billones, un déficit fiscal de 1,9%, una pauta inflacionaria de 60% y destina el 70% de los recursos a rubros sociales.
El proyecto original enviado por el Poder Ejecutivo fue modificada durante la discusión de comisión en Diputados y luego en el recinto de la Cámara baja obtuvo 180 votos positivos, 22 negativos y 49 abstenciones.
Resultados en Diputados
El proyecto de Presupuesto 2023 tiene como puntos centrales la previsión de un gasto global de casi $ 29 billones, un déficit fiscal de 1,9%, una pauta inflacionaria de 60% y destina el 70% de los recursos a rubros sociales.
La norma, modificada en su discusión de comisión y luego en el recinto de la cámara baja, obtuvo 180 votos positivos, 22 negativos y 49 abstenciones.
La oposición logró bloquear artículos que propiciaban que jueces y empleados judiciales pasen a pagar el impuesto a las Ganancias y el artículo que permitía al Gobierno manejar las alícuotas de las retenciones al campo.
Además de los legisladores del FdT y de sus aliados, el proyecto también fue apoyado por el peronismo disidente y el radicalismo; en tanto la izquierda, la Coalición Cívica y los bloques de derecha se opusieron y el PRO se abstuvo.
Situación en el Senado
En la Cámara alta, el oficialismo necesita que todos sus senadores estén sentados en las bancas, además de los representantes de Juntos Somos Río Negro, del Frente Renovador de la Concordia y de Hay Futuro Argentina.
El interbloque del FdT posee 35 senadores propios, a los que se suman esos tres legisladores que son sus aliados.
El jefe de la bancada oficialista, José Mayans, permanece internado en el Hospital Italiano de la ciudad de Buenos Aires, y su ausencia deja al principal bloque del Senado con el número justo para habilitar el debate.
No obstante, se espera que la representante de Córdoba Federal, Alejandra María Vigo, se sume para completar el número necesario para el quórum.
Postura de la oposición: JxC y el Radicalismo
Por el lado de la oposición, el bloque de Juntos por el Cambio (JxC), compuesto por 33 integrantes, resolverá durante la semana cómo se plantará ante la sesión y, luego, la posición que adoptará al momento de votar la ley.
Si la principal bancada de la oposición repite la postura de sus pares de Diputados, el oficialismo tendrá asegurada la ley cuando llegue al recinto.
No obstante, algunos representantes del radicalismo ya dejaron trascender que no quieren prestar su aprobación al Presupuesto, por lo que el oficialismo debe asegurarse sí o sí de alinear a todos sus integrantes y a sus aliados.
Objetivos del oficialismo
El objetivo del oficialismo es que el proyecto sea aprobado tal como vino de Diputados, para que sea ley y que no deba volver en segunda revisión a la Cámara baja.
Por otro lado, el oficialismo también dejó trascender la idea de que, además del proyecto de ley de Presupuesto, se incluya en el temario de la sesión el proyecto de ley que prorroga por cinco años la vigencia de los impuestos a las Ganancias, a los Débitos y Créditos Bancarios, conocido como Ley del Cheque, del Monotributo, del Capital de la Cooperativa y el adicional del Cigarrillo que vencen a fines de 2022 y representan el 32% de la recaudación impositiva.
Esta iniciativa, que ya fue aprobada en Diputados, obtuvo dictamen en la Comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado el 21 de septiembre pasado.
Rubinstein: "Para bajar el impuesto inflacionario lo más importante es bajar el déficit"
El secretario de Programación Económica del Ministerio de Economía aseguró que para combatir la inflación es necesario “bajar el déficit todo lo necesario”, y llamó a los dirigentes políticos a reconocer los “distintos errores” que llevaron a la Argentina a “perder las reservas, a endeudarnos, a tener déficits muy altos”.
“Para bajar el impuesto inflacionario lo más importante es bajar el déficit todo lo que sea necesario”, dijo esta tarde Rubinstein ante los senadores que integran la Comisión de Presupuesto y Hacienda.
Durante la primera jornada de discusión del Presupuesto 2023 en la Cámara alta, que se desarrolla en el Salón Azul del Palacio Legislativo, el funcionario afirmó que “este es un presupuesto de transición para tener la situación más ordenada fiscalmente”.
“Este Presupuesto va en camino hacia el equilibrio fiscal y a pensar en la macroeconomía que logramos hace 20 años, cuando teníamos un superávit fiscal de 3 puntos del PBI. Hoy tenemos 6.000 millones de dólares de reservas netas, cuando entonces teníamos 40 mil millones y una inflación del 5 por ciento anual. Pero no era la paz de los cementerios: la Argentina crecía”, señaló.
Recordó que cuando trabajaba en el gabinete del ex ministro de Economía Roberto Lavagna, se estaba “pensando en hacer un fondo anticíclico porque sobraban los dólares”.
“Esa economía la logramos los argentinos, nunca debimos habernos apartado de ella. Los dirigentes políticos deberían reconocer los distintos errores que nos llevaron a perder las reservas, a endeudarnos, a tener defícits muy altos”, sentenció.
Insistió en que “en la mira de ese tipo de macro economía ordenada, aparece este Presupuesto que vemos como una transición en ese camino: una mejora fiscal, un orden fiscal que nos debería dar una inflación realista del 60%” en 2023.
“Si uno tiene un 1,9 por ciento de déficit, una base monetaria del 4,7 del PBI, no hay posibilidad de financiamiento interno ni de financiamiento con reservas, la inflación va a ser del orden del 50 por ciento, no del diez. Y si uno quisiera reemplazar eso con controles, no va a funcionar”, agregó.