Hace un tiempo escuchamos las primeras advertencias, una serie de factores desafortunados iban a provocar un periodo de escasez de microchips.
Fábricas incendiadas, conflictos gremiales y simplemente la mala planificación de algunas empresas eran algunas de las causas principales.
General Motors anunció recientemente que ha tenido que cortar la producción en cuatro de sus plantas por la falta de procesadores. La medida será efectiva durante la segunda semana de Febrero.
Estimaciones no oficiales apuntan a que con este freno se dejarán de producir unos 10 mil vehículos durante la semana.
Otras empresas GM no es de ninguna manera la única empresa que ha acusado el impacto de la falta de tan preciado componente. Ford, Subaru, Toyota, Chevrolet y Volkswagen también han tenido que reducir la producción.
Otras compañías, como Mazda, han apuntado que podrían tener que parar sus plantas en Febrero y Marzo.
Según la consultora financiera británica IHS Markit el sector podría producir unas 672 mil unidades menos que las que fueron orginalmente anticipadas para el primer trimestre de 2021. La firma espera que el problma dure por lo menos hasta el tercer trimestre del año, por lo que las pérdidas serían aún mayores.
AutoForecast Solutions, una empresa dedicada a la información sobre la industria automotriz, ha calculado que la caida de la producción ha llegado a los 564 mil vehículos y podría acumular en todo el año a los 964 mil.