Jack Palmer, uno de los responsables de la divisa digital, explicó por Twitter porque se ha alejado de la industria y cuáles son sus prinicipales objeciones al actual sistema de criptomonedas.
Lo primero que debemos señalar es que Dogecoin fue pensada como una parodia. Una burla al universo de las criptomonedas. No extraña entonces que uno de sus creadores, Jackson Palmer, haya lanzado recientemente una fuerte andanada de críticas contra estas divisas.
A continuación reproducimos algunas de sus críticas y las relacionamos con algunos sucesos que creemos pueden ser pertinentes. Dejamos al el lector la consideración final sobre los dichos de Palmer.
Palmer apunta que luego de estudiar durante años el espacio de las criptomonedas ha llegado a la conclusión de que se trata de una tecnología hipercapitalista construida para amplificar la riqueza de sus proponentes a través de una combinación de evasión de impuestos, regulaciones disminuidas y escasez artificial.
Lo dicho coincide con muchas de las críticas que economistas y autoridades reguladoras han realizado con anterioridad. Aunque como es de esperarse muchas veces sin la crítica al sistema capitalista.
Los mismos de siempre Palmer también apunta que a pesar de como se la presenta a veces, la industria de las criptomonedas está controlada por un cartel de figuras con grandes fortunas que con el tiempo han ido incorporando a muchas de las instituciones que en teoría iban a reemplazar.
Elon Musk es quizás uno de los ejemplos más dramáticos de influencia en el mercado del as criptomonedas. Cuando el empresario elogia una divisa esta sube de precio, cuando la desestima el precio cae. Por supuesto, las decisiones tomadas en empresas como Tesla son quizás más importantes.
Un bien aspiracional Otro aspecto criticado es la idea de que las criptomonedas son una forma de hacerse rico rápidamente. Palmer apunta que esta imagen tiene como objetivo aprovecharse de las personas desesperadas.
La indefensión de los pequeños inversores es uno de los temas más preocupantes. Casi no existen los mecanismos para evitar la estafas, si un usuario pierde su clave no hay nadie que pueda ayudarlo a recuperar sus ahorros y los ataques informáticos son un peligro a considerar.
En Argentina el Banco Central ha realizado advertencias similares.
Rechazo Palmer afirma que no tiene la energía para estar permanentemente discutiendo sobre las criptomonedas, que cada vez que alguien realiza una crítica los partidarios de las divisas digitales responden con enojo en vez de participar de una discusión racional. La tecnología, afirma, puede ser un vehículo para mejorar el mundo, pero no cuando se la divorcia de sus consecuencias políticas y sociales.