Una reciente resolución intenta impulsar algunos límites en el uso de esta tecnología. Otros aspecto destacable es el rechazo a las bases de datos privadas y el apoyo a las alternativas de código abierto.
El Parlamento Europeo ha realizado un pedido para que se prohíba el uso de los sistemas de reconocimiento facial automatizados en espacios públicos. También ha establecido que las bases de datos privadas deben ser prohibidas.
La resolución fue aprobada con unos 377 votos a favor, 248 en contra y 62 abstenciones. Es importante notar que no es vinculante, solo indica el rumbo que las legislaturas de los países miembros deberían tomar.
La tecnología de reconocimiento facial todavía puede ser utilizada en cualquier espacio. Lo que se intenta eliminar es el accionar sin supervisión humana de las inteligencias artificiales.
Argumentos El parlamento ha señalado que los ciudadanos europeos deberían ser vigilados solo cuando son sospechosos de un crimen.
Una de las preocupaciones apuntadas es el descubrimiento de prejuicios en las inteligencias artificiales. Para evitar la discriminación se consideró que es necesario que exista supervisión humana y protecciones legales.
Los algoritmos, se apuntó, deben ser transparentes y estar adecuadamente documentados para su examinación. De ser posible debe siempre favorecerse las alternativas de código abierto.
Los representantes se han manifestado en contra del uso de los sistemas de puntaje social así como del uso de sistemas automatizados de identificación facial para el control de las fronteras.
Contexto El documento señala que la ley europea establece que las personas tienen el derecho a no estar sujetas a decisiones con repercusiones legales basadas solamente en el procesamiento automatizado de datos.
Algunos países de Europa exigen el registro de las IA utilizadas en su territorio y el personal a cargo del mantenimiento de los sistemas.
Por otro lado varias agencias policiales han estado utilizando bases de datos privadas, como Clearview.