Las ilustraciones del primer capítulo de Zarya of the Dawn fueron creadas con el programa Midjourney.

Kris Kashtanova es la creadora de un comic cuyas ilustraciones han sido producidas a través de un sistema de inteligencia artificial. La herramientas empleada no es otra que uno de los últimos fenómenos en este campo, Midjourney.

Midjourney exigió un breve periodo de aprendizaje. Según Kashtanova, en un par de días se había hecho una buena idea de como funcionaba cada parámetro que el programa ofrecía. Sin embago, el tiempo de trabajo depende en gran medida de que tan específicos y pulidos sean los resultados que se quieran obtener. Kashtanova necesitó 1500 generaciones para crear 18 páginas.

Es importante notar que el personaje principal fue creado con la herramienta Metahuman (Unreal Engine) y luego convertido en una imagen similar a la que se produciría para una historieta. Esa imagen fue empleada luego por Midjourney como parte de sus proceso de generación.

El resultado fue el primer capítulo de Zarya of the Dawn. Una historia sobre una joven con amnesia despertando en una Nueva York abandonada. Si te interesa puedes encontrarlo aqui en formato PDF.

Planes

Kashtanova no cree que la IA, al menos en su actual fase de desarrollo, suponga el reemplazo de los artistas profesionales. Ella ve lo conseguido con Midjourney como un bosquejo útil hasta que pueda reunir la suficiente cantidad de dinero para contratar un artista humano.

Los resultados conseguidos en el comic son muy buenos. Más que prometedores para un futuro cercano. Sin embargo a menudo carecen de cierto encanto o carácter en términos de relato, y es posible que eso sea lo que la autora hecha en falta.

Derechos de autor

El 15 de septiembre Kashtanova obtuvo el registro de copyright para su comic. En la presentación dejó bien en claro la herramienta utilizada. La decisión sienta un precedente y puede ser vital para todos aquellos que quieran emplear inteligencias artificiales en la elaboración de sus productos.

Hay que tener en claro que la IA es considerada una herramienta, el derecho se otorga a su operador. El derecho de copia, al menos en los Estados Unidos, solo puede ser otorgado a una persona de carne y hueso. En esta producción también están incluidos la escritura del comic y varias decisiones artísticas y de composición que fueron trabajo puramente humano.