Hace algunas semanas, la Secretaría de Comercio comenzó a negociar con las empresas del sector de consumo masivo cambios en el acuerdo de Precios Justos: buscan adelantar el vencimiento de febrero para poder bajar de 4% a 3,2% la pauta de aumentos mensuales para los productos que se venden en supermercado y que están fuera de la lista y extender el programa hasta junio.
El alza del valor de los productos comestibles y de algunos servicios regulados impulsaron esta aceleración en el comienzo del año, que se reflejaría en un índice superior al de diciembre
El objetivo, además, es sumar otros rubros con la misma pauta de aumentos y plazos: indumentaria, calzado y probablemente construcción. Para las empresas del sector de consumo masivo, el cambio en la pauta complica su esquema de costos, con una perspectiva de inflación por encima del 5% -e incluso cercana al 6% según algunas consultoras- para enero.
“Nosotros seguimos llevando a las reuniones el tema de costos que es del 6% mensual”, explicó una fuente del sector. “En nuestro caso, solo la materia prima aumentó 7%”, dijeron desde otra empresa. Por eso, en las negociaciones que se llevan adelante esta semana, uno de los puntos que están negociando es la salida de la lista de productos que mantienen su precio fijo dentro del programa de algunos artículos cuyo precio quedó más desfasado con respecto a la inflación. En muchos casos, porque son los productos que ya venían de las listas de Precios Cuidados, la versión anterior, que tuvieron menos aumentos que el resto.
Según fuentes del sector, estos productos que salen de la lista podrían tener aumentos autorizados alrededor de alrededor de 9 por ciento durante febrero. “Estamos preparando la propuesta para mandarla este lunes. La Secretaría está pidiendo adelantar la renovación de la canasta para que arranque en febrero y que vaya hasta junio. El esquema de 3,2% es lo más difícil porque además de la inflación hay mucha disparidad de situaciones y costos entre productos”, señaló otra fuente del sector.
Abastecimiento
Algunas cadenas de supermercados también vienen participando de las reuniones. En su caso, el reclamo es por problemas de abastecimiento en ciertos productos, los que no están recibiendo de parte de las empresas proveedoras. Según señaló Matías Tombolini la semana pasada el cumplimiento es mixto. “El nivel de cumplimiento en góndolas de mayoristas y supermercados y en stock es del orden del 70%, en señalización del 77%, en los precios fijos del 98% y en el sendero de precios de un 88%. El desafío más importante es que el producto esté en la góndola”, señaló.
Un tema pendiente es la inclusión de los comercios de cercanía en los acuerdos de precios. Hoy Precios Justos solo está disponible en grandes cadenas de supermercados y mayoristas, lo que reduce su disponibilidad especialmente para los sectores de menores ingresos.
Esta semana, participarán de las reuniones representantes de la Federación de Supermercados y Autoservicio (FASA) que agrupa a las cadenas más chicas y comercios de cercanía. “Siempre tenemos esperanzas y queremos apoyar a los programas. Por el tema de provisión y que tenga alcance nacional, que se den las condiciones para que tenga presencial en todo el territorio”, dijeron a Infobae desde la federación.
“El dólar informal sigue creciendo y la mercadería va cambiando el precio. No sabemos si es por los mayoristas o los fabricantes. Tenemos en enero subas de 12% en limpieza higiene personal 10% galletitas 7% en yerbas. La mercadería no frenó el precio”, dijo Fernando Savore, titular de la Federación de Almaceneros de la provincia de Buenos Aires.
“Mientras tengamos mercadería que nos abastezcan los mayoristas el precio competitivo va a seguir estando. Un tema por ejemplo es el aceite de de girasol que los mayoristas nos venden a $799 y en Precios Justos está a $430″, agregó.
La Secretaría de Comercio está realizando relevamientos en comercios de proximidad, como los supermercados asiáticos, que no están dentro del programa. “Les pedimos si querían compartir la información de la factura de compra de diciembre y de enero porque a veces lo que pasa que la empresa grande de alimentos le vende a un distribuidor respetando el sendero del 4% y el distribuidor le vende al chino con un precio diferencial, estamos tratando de trackear esto”, dijo Tombolini. La lupa está sobre todo en productos frescos, gaseosas y alimentos.