La Comisión Europea formalizó ante el embajador de Rusia ante la Unión Europea (UE) su rechazo a las sanciones adoptadas la semana pasada por Moscú contra funcionarios del bloque, en represalia a medidas restrictivas, en tanto el Reino Unido y Estados Unidos coincidieron en cuestionar actitudes del gobierno de Vladimir Putin.
El representante de Rusia ante la UE, Vladimir Chizhov, fue recibido por la secretaria general de la Comisión, Ilze Juhansone, y por Stefano Sannino, del Servicio Europeo de Acción Exterior, quienes le transmitieron la "condena" del bloque a la decisión de aplicar sanciones a funcionarios europeos.
El viernes, Moscú anunció la adopción de sanciones contra ocho funcionarios europeos como respuesta a las medidas restrictivas que Bruselas adoptó en meses recientes contra funcionarios rusos del área de seguridad.
Entre los sancionados por Rusia se encuentra el presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, y la comisaria europea Vera Jourova, además de otros funcionarios nacionales de países de la UE.
"El embajador Chizhov fue informado del fuerte rechazo y la firme condena por parte de las instituciones de la UE y los Estados miembros de la UE a esta decisión, que tienen una motivación puramente política y carece de toda justificación legal", anunció la Comisión en una nota oficial reportada por la agencia AFP.
Según el texto, los funcionarios le expresaron a Chizhov la preocupación por "el impacto acumulado" de estas decisiones sobre las relaciones entre la UE y Rusia.
Los funcionarios europeos apuntaron que la UE "se reserva el derecho de tomar en respuesta las medidas que considere adecuadas".
En el encuentro en Bruselas, Juhansone y Sannino recordaron también la reciente secuencia de expulsión recíproca de diplomáticos con la República Checa.
La Unión Europea había reaccionado con dureza ya la semana pasada a la decisión rusa y en una nota conjunta los líderes de las instituciones europeas afirmaron que Rusia ha "adoptado el camino de la confrontación en vez de buscar revertir la trayectoria negativa de las relaciones" entre Moscú y Bruselas.