Doce personas comenzaron a ser juzgadas como integrantes del llamado "Clan Loza", al que se lo acusa de ser una asociación ilícita dedicada al narcotráfico y lavado de activos, en un debate oral en el que las defensas reclamaron que se les otorguen prisiones domiciliarias a los imputados y cuestionaron las audiencias remotas.
El debate a cargo del Tribunal Oral en lo Penal Económico 3 se inició de manera remota con siete de los 12 acusados ubicados juntos y casi sin distancia social, en una sala de videoconferencias del Complejo Penitenciario Federal 2 de Marcos Paz, algo que derivó en cuestionamientos por parte de las defensas.
Tras escucharse una lectura resumida de la acusación fiscal, el presidente del Tribunal Luis Imaz dio por iniciado el juicio pasadas las 11.30 y de inmediato las defensas comenzaron con planteos preliminares que incluyeron pedidos para suspender el debate hasta tanto pueda hacerse presencial.
Además, reclamaron que se otorgue prisión domiciliaria a los acusados que están en cárcel común para que puedan seguir el debate oral desde sus casas con tobillera electrónica o consigna policial.
"Hay siete detenidos sin distancia social en la sala de videoconferencias de Marcos Paz, todos juntos", objetaron los defensores, al pedir que se suspenda el debate hasta que se modifique esta situación.
Tras un receso, el tribunal rechazó estos pedidos, por lo que el debate continuó con otros planteos de las partes referidos a la incorporación al debate de distintas pruebas y la citación a 400 testigos desistidos por la Unidad de Investigación Financiera (UIF) en la etapa preliminar.
En ese sentido, los defensores objetaron también la incorporación tras su fallecimiento de la declaración filmada o el legajo de un arrepentido en la causa, Diego Xavier Guastini, un contador y financista asesinado a balazos en octubre de 2017 en el partido bonaerense de Quilmes y que también declaró en otras causas por narcotráfico resonantes.
Además, pidieron tener acceso a la causa en España vinculada a la misma investigación, por lo que el tribunal hizo un nuevo receso, luego del cual, dispuso el acceso de las partes a las mencionadas pruebas y que se admitan todos los testigos.
De hecho, el presidente Imas anunció que se citarán a 25 testigos por jornada, y que cada semana habrá dos audiencias y que las partes podrán en esa oportunidad plantear si se desiste o no en cada caso en particular.
Por último, el tribunal pasó a un cuarto intermedio hasta el 7 de junio próximo cuando se llevarán a cabo las indagatorias de los acusados.
Los imputados
Son Erwin Loza, su esposa Clara Fernández, sus sobrinos Gonzalo, Daniel y Alan Loza; el ciudadano peruano William Weston Millones, Juan Carlos Fernández Gerardo Cuccione, Javier Silveira López, Estela Gallo, Américo Santi y Natalia Grosso
Según la acusación fiscal, se dio por probado que todos formaron parte de una organización que actuó desde 2008 hasta 2018 en el país mediante contrabando de divisas entre la Argentina y España.
La banda quedó procesada por el envío de droga desde la Argentina hacia España y las maniobras de lavado de dinero obtenido con este delito, como la compra de inmuebles y vehículos de alta gama, entre ellos una Ferrari que en la década del '90 era utilizada por Diego Armando Maradona.