Cuando Facebook compró Oculus su objetivo fue apoderarse de una de las empresas más importantes en el mundo de la realidad virtual, con la idea de que posiblemente este sería el medio de acceso a contenidos en Internet del futuro.
Pero es posible que la próxima gran plataforma no sea RV, sino RA. La realidad aumentada es mucho más fácil de usar, cómoda y accesible. Y según los ingenieros de Facebook se destaca por integrar el entorno real y virtual de una forma fluida.
Hace poco Microsoft presentó su solución Mesh, para la interacción con objetos en RA. Ahora le toca el turno a Facebook.
Con el poder de la mente En este caso tenemos unos brazaletes que están destinados a interactuar con los futuros anteojos de realidad aumentada de la misma empresa.
Los brazaletes tienen sensores que interpretan la actividad eléctrica de los nervios motores. De esta manera el dispositivo permitiría que naveguemos a través de las opciones de la interfaz a través de movimientos de apenas milímetros.
Contexto y sensaciones En teoría el sistema permite un gran nivel de control. Para tal fin interpreta lo que quiere hacer el usuario basado en el contexto de las aplicaciones utilizadas.
También se han incorporado respuestas hápticas a las interacciones. Los brazaletes aplican cierto nivel de presión sobre las muñecas al realizar algunas acciones.
Tecnología probada La idea de usar los impulsos eléctricos que mueven a los músculos para interactuar con dispositivos electrónicos no es nueva. Uno de los usos más interesantes se ha dado en la elaboración de prótesis avanzadas.
En estos casos las inteligencias artificiales involucradas son capaces de distinguir entre los impulsos de preparación de movimiento y los de movimiento. Lo que impide que las manos ortopédicas se muevan a cada rato cuando solo consideramos un movimiento.