Los NFT, tokens no reproducibles, están de moda. Si quieres adquirir un certificado de propiedad para un objeto que quizás nunca esté realmente en tu posesión no vamos a juzgarte.
El campo del arte, sobre todo en sus expresiones más modernas y experimentales parece determinado a abrazar este concepto.
Prueba de ello es la obra de Sophia, un robot creado por David Hanson cuyo trabajo saldrá a la venta a través de una subasta.
Colaboración Las obras de Sophia son en realidad un trabajo de colaboración con el artista italiano Andrea Bonaceto.
El robot toma elementos del arte de Bonaceto, la historia del arte y sus propios trabajos físicos en diversas superficies. Con ellos realiza un proceso descrito por su creador como un ciclo de repeticiones evolutivas (iterative loops of evolution).
Sophia explica que utiliza redes transformadoras y algoritmos genéticos. Los algoritmos crean de esta manera patrones que no existían antes. Por lo dicho el robot cree que las máquinas pueden ser creativas.
La obra Sophia Instantiation es un video de 12 segundos que muestra como un retrato de Bonaceto se transforma en la obra digital de Sophia.
Esta es la obra que se adquiere a través de un NFT.
El video es acompañado con un trabajo físico, pintado por la mano robótica de la afamada artista sobre una impresión de su autoretrato.
Sobre esto último existe un detalle importante. Luego de terminada la subasta Sophia interactuará con el comprador para estudiar su rostro y agregar el último toque a la obra, incorporando el resultado de dicha interacción a la pieza.
Así pues, en este caso el comprador se lleva algo concreto y además personalizado. Aunque este algo sea solo el extra.