La promoción para el desarrollo de la industria tecnológica y de electrodomésticos en la provincia cuenta con defensores y detractores, apoyo incondicional y críticas salvajes. En ocasiones, la búsqueda de una evaluación razonable.

Dos personas pueden estar en el mismo barco y pelearse fuertemente mientras deciden para que lado conviene remar. Esta parece ser a menudo la realidad argentina y la discusión sobre el regimen de promoción de desarrollo en Tierra del Fuego es quizás uno de los mejores ejemplos.

Recientemente se han renovado las exenciones impositivas que favorecen a dicha provincia y tiene como objetivo fomentar la industria electrónica y de electrodomésticos. El vencimiento se iba a producir en 2023, la renovación le ofrece a las empresas radicadas otros 15 años.

Sin embargo este compromiso ha llegado con una exigencia, el aporte de millones cada año para la reconversión productiva de Tierra del Fuego. Según el gobierno argentino esto supondría algo así como unos ARS 10 mil millones al año.

Renovación de la polémica El regimen de promoción en Tierra del Fuego ha dado lugar a intensas polémicas.

Sus defensores señalan que de esta manera se estimula la producción nacional. Sus detractores apuntan que las empresas radicadas solo empaquetan productos importados.

En realidad es más justo señalar que existe cierto grado de elaboración y ensamblado, pero está lejos de la imagen de producción nacional que a veces el gobierno quiere impulsar.

A favor de la localización del regimen en Tierra del Fuego se apunta que es necesario para el desarrollo de la provincia y la soberanía nacional. Los críticos señalan que la isla podría desarrollarse con la industria del turismo, la pesquera, maderera y energética.

Una consideración aparte es el impacto ambiental y la logística extra que supone crear un polo productivo lejos de los principales mercados.

Existen luego temas vinculados a decisiones estratégicas. Una pregunta que se puede hacer es si el desarrollo de una industria vinculada al hardware informático es clave para el desarrollo, o si el actual regimen encarece los costos para la industria del software.

La industria del software es una de las de mayor crecimiento en el país. Sin embargo es importante notar que tiene su propio regimen de beneficios, aún con todas las idas y venidas que ha sufrido.

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